Tal cual lo comentamos en el capítulo de cirugía lasik, existen pacientes en los cuales producto de sus defectos visuales con dioptrías muy altas las tecnologías con láser están limitadas. Existe límites donde ya no es aconsejable seguir “puliendo” la córnea con láser, dado que esta puede tornarse demasiado delgada, y comienza a aparecer un fenómeno llamado “regresión” que consiste básicamente en que un porcentaje del defecto original (miopía o astigmatismo) vuele a aparecer con el tiempo en los ojos operados. Además algunos pacientes con bajas miopías o hipermetropías cuyas córneas son muy delgadas o débiles y que por ende no son buenos candidatos a la cirugía láser pueden ser buenos candidatos a esta cirugía.

Los lentes intraoculares son dispositivos aproximadamente del tamaño de una lenteja que funcionan de una manera similar a los lentes de contacto, pero al ir dentro del ojo, no generan molestias sobre la superficie ocular, el paciente no los siente. Para enfrentar los problemas de la corrección de la miopía, hipermetropía y astigmatismo se han desarrollado dos tipos de lentes intraoculares:

1.- Fáquicos

se implantan en el ojo manteniendo su cristalino natural. La ventaja de estos lentes es que al mantener el cristalino en su lugar, en los pacientes jóvenes, permiten una visión nítida tanto de lejos como de cerca.

2.- Pseudofáquicos

se implantan donde antes estaba ubicado el cristalino, por lo cual antes de insertarlos en el ojo se requiere remover cuidadosamente el cristalino claro (una cirugía similar a la de cirugía de cataratas).

Dependiendo del defecto óptico presente, la cuantía de astigmatismo, las preferencias del paciente, experiencia del cirujano y las características propias de cada ojo se debe elegir el correcto tipo de lente, modelo y poder. Los lentes fáquicos tienen una duración indefinida (sólo deben ser removidos si el paciente desarrolla una catarata en el futuro) y además tienen la ventaja que a diferencia de todas las otras cirugías mencionadas son removibles, por ende este es un tipo de cirugía potencialmente reversible, cosa muy infrecuente por la gran satisfacción que nos encontramos al implantar a estos pacientes.

Los modelos de lentes pseudofáquicos son varios, pero funcionalmente se dividen en dos tipos:

Los modelos de lentes pseudofáquicos son varios, pero funcionalmente se dividen en dos tipos:

1.- Monofocales

al perderse el cristalino el ojo queda “enfocado” a una sola distancia, que suele ser a distancia para traer una visión de distancia cómoda, lo cual en asociación con anteojos de trabajo cercano (computador, lectura, costura) permite una excelente rehabilitación visual. Esta técnica permite corregir miopía, hipermetropía o astigmatismo.

2.- Multifocales

dado que con los modelos anteriores los pacientes se encuentran limitados en la visión de cerca, se han desarrollado lentes intraoculares que permiten la visión simultánea de lejos y cerca. Dado su funcionamiento óptico, requieren de un periodo de acostumbramiento (cerebral) en el postoperatorio.